Francois Truffaut: fue una de las figuras más destacadas del cine francés de los 60 y 70, cuyo estilo dejó huellas tangibles en las futuras generaciones de cineastas.
La vida de Truffaut: una infancia difícil y un gran amor por los libros y el cine
Periodista, crítico, actor, guionista, director de cine, François Truffaut nació en París, Francia, el 6 de Febrero de 1932. Hijo de Janine de Monferrand y de padre desconocido, su vida estuvo marcada por una infancia y adolescencia difíciles. Nunca conoció a su verdadero padre, y la relación con su madre y su padrastro, a quien debe su apellido, fue bastante conflictiva. Esto lo lleva a mentir, escaparse de clases y hasta a delinquir, por lo cual termina en varias ocasiones internado en centros juveniles de detención. Estos acontecimientos se verán reflejados en su primer film Los cuatrocientos golpes (Les 400 coups 1959). Para evadirse de su complicada vida familiar, François se refugia en las salas de cine y la lectura, Balzac, Tolstoi, Dumas y Proust, eran algunos de sus autores favoritos. Durante su infancia y adolescencia frecuenta asiduamente salas de cine y cine clubs, su gran escuela fue la cinemateca francesa.
Una infinita pasión por el cine
A los catorce años, abandona definitivamente sus estudios y se desempeña en empleos menores. En octubre de 1948, con el dinero obtenido en sus trabajos funda un cineclub, Le Cercle Cinémanie, y para cubrir los gastos de las primeras funciones roba una máquina de escribir de la oficina de su padre (anécdota que se ve en Los cuatrocientos golpes).
Las funciones tenían lugar en un teatro alquilado y coincidían en día y horario con las de otro cine club presidido por el teórico y ensayista de cine André Bazin, a quien Truffaut fue a ver para pedirle que cambie el horario. Este encuentro cambiaría su vida, Bazin se convertiría en su mentor, y de su mano Truffaut ingresaría en el terreno de la crítica y la realización cinematográfica. Las deudas complicaron la continuidad del Cine Club, el padrastro de François se encargó de cubrirlas y el joven prometió por escrito no seguir adelante con su proyecto. Frente al incumplimiento de esta promesa fue entregado a la policía y finalmente terminó recluido en un centro asistencial para jóvenes.
En 1949 André Bazin es contactado por la psicóloga de la institución donde François estaba detenido para que lo asistiera y le diera un empleo. En 1949 Truffaut obtiene la libertad condicional, en 1950 Bazin lo contrata como su secretario personal y Truffaut consigue emanciparse de sus padres y comienza su labor como periodista en la revista Elle y participa también en la sociedad fílmica Objectif 49, un cineclub donde se reunían artistas, escritores y críticos que se declaraban en contra las tendencias del cine francés tradicional de la posguerra. Este mismo año, Truffaut se enrola en el ejército voluntariamente, dos años después luego de varios intentos de deserción es encarcelado, en 1952 tras fuertes presiones de Bazin y otros contactos políticos es finalmente liberado, consigue trabajo en la revista Cinemonde y comienza a preparar un artículo para la revista Cahiers Du Cinema que Bazin había fundado mientras él estaba en la cárcel.
Los Cahiers du cinema y los inicios de Truffaut en la crítica cinematográfica
En 1951 André Bazin y Jacques Doniol-Valcroze, fundan la revista Cahiers du cinema, con la finalidad de reflexionar acerca del cine y la significación de la imagen movimiento. A través de los escritos publicados en la revista se buscaba educar al espectador para que pudiera apreciar las nuevas formas cinematográficas y se exaltaban las obras del neorrealismo italiano (De Sica, Rossellini), de Dreyer, Bergman, Fellini y Buñuel, y de cineastas franceses como Renoir, Bresson, Tati, Ophuls, Gance, entre otros. Los Cahiers reivindicaban el cine popular de Hollywood halagando la habilidad narrativa y el estilo vital del mismo, directores como Orson Welles, Howard Hawks, Fritz Lang y Alfred Hitchcock eran los más apreciados. Además de escribir en Cahiers, Truffaut colabora en otra serie de publicaciones como Arts, France Observateur y La Parisienne.
En enero de 1954, François Truffaut publica un artículo en el número 31 de Cahiers llamado Una cierta tendencia del cine francés en el cual cuestiona duramente la tradición de calidad del cine francés de entonces, dedicado sobre todo a las adaptaciones de clásicos literarios. Para Truffaut se trataba de un cine academicista, en el cual los guionistas trataban siempre los mismos temas y las mismas fórmulas. Truffaut criticaba al actual cine francés por ser un cine de guionistas más que de realizadores. En oposición a este Truffaut postulaba un cine en el cual el director era el verdadero autor y responsable del film, basándose en el ensayo escrito por Alexandre Astruc en 1948 “Nacimiento de una nueva vanguardia: la cámera-stylo” , en el cual marca el inicio hacia la consideración de los filmes como expresión directa de la personalidad del director.
Escribir con la cámara
Para Astruc la cámara podía asimilarse a la pluma del escritor, mientras este se expresa mediante las palabras, el director de cine lo hace a través de la puesta en escena, o sea de las imágenes y los sonidos, a esto se lo conoció como “la política de los autores”: (…) La atención ya no se dirige a lo que dice (o pretende decir) la obra, sino a cómo lo dice efectivamente; no es el tema sino el estilo que impregna el filme, lo que revela la actitud y la orientación del autor. (Casetti: 97). La revista Cahiers du cinéma, desde su primer número en 1951, se convierte en órgano clave para la difusión de esta teoría. Para los críticos de Cahiers, el director era el responsable último de la estética y la puesta en escena del filme. Entre los directores considerados “autores” destacaban a Jean Renoir, Luis Buñuel, Roberto Rossellini, Alfred Hitchcock, Howard Hawks, Max Ophuls, Vincent Minnelli, Orson Welles, Nicholas Ray y Luchino Visconti, entre otros. Jean Luc Godard, Jacques Rivette y Eric Rohmer, fueron otros de los críticos que en su momento desde las páginas de Cahiers, se encargaron de difundir esta teoría, que después aplicarían en la realización cinematográfica.
En 1954 Truffaut dirige su primer corto titulado Une visite. Durante tres años, de 1955 a 1957, trabaja como ayudante de Roberto Rossellini en la preparación de tres películas que no llegan a realizarse. En 1957 se casa con Madeleine Morgenstern, hija de un importante distribuidor, esto le permite crear su propia productora Les films du carrosse, nombre elegido en homenaje a Jean Renoir y su película La carrosse d’or (1953), ese mismo año dirige Los mocosos, adaptación de un cuento de Maurice Pons. En febrero de 1958 gana por este corto el premio al mejor director en el Festival de Bruselas. De esta forma Truffaut comienza una fructífera carrera como director de cine.
La Nouvelle Vague
A fines de la década del 50 la Nueva Ola comienza a tomar cuerpo con las primeras producciones de autores como Claude Chabrol, quien con ayuda de una herencia de su mujer realiza El bello Sergio 1958, un film de bajo presupuesto sin grandes estrellas, cuyo éxito le permite rodar Los primos al año siguiente, el mismo año que Truffaut rueda Los 400 golpes, galardonado con el premio a la mejor dirección en Cannes, lo que da más visibilidad al movimiento, apoyado por el ministerio de cultura y la crítica. Con esto no se premiaba sólo una película sino que se validaba una propuesta estética, una “nueva ola” renovadora y crítica en oposición al cine francés de la época que daba más importancia a los decorados y las reconstrucciones de época que a las historias que contaban. En el festival se estrena también con gran éxito el film de Alain Resnais Hiroshima Mon amour, y quedan establecidas las condiciones para el nacimiento del nuevo cine francés que aportará autenticidad y frescura a la temática y a la narrativa del lenguaje cinematográfico, aspectos que se consideraban estancados en un cine primordialmente literario. La Nueva Ola conquistará los mercados internacionales y permitirá el renacer de la industria de cine francesa.
Renovación del cine francés
Los autores englobados en la Nouvelle Vague se propusieron renovar la cinematografía francesa a la que consideraban demasiado academicista. Se suele incluir dentro del movimiento a Claude Chabrol, Jacques Demy, Margarite Duras, Jean Luc Godard, Louis Malle, Alain Resnais, Jacques Rivette, Alain Robbe-Grillet, Eric Rohmer, y Agnès Varda. Con estilos diversos, los nuevos cineastas, que procedían en su mayoría de la crítica de cine (en especial de la revista Cahiers) o del documental, se oponían al cine de la época, al que veían demasiado estructurado y promovían un cine con mayor libertad creativa – en contraposición con las exigencias del cine comercial-, con preeminencia de rodaje en exteriores, y donde fuera posible la improvisación. Las políticas proteccionistas aplicadas por el gobierno francés a la industria cinematográfica favorecieron su desarrollo. Los primeros films del movimiento tuvieron un gran éxito de taquilla y fueron también apoyados por la crítica y premiados en festivales, lo cual propició que toda una nueva generación de jóvenes realizadores pudieran debutar en la producción cinematográfica. En su cine se ve claramente la influencia neorrealista: films de bajo presupuesto rodados en escenarios reales, con cámara en mano, iluminación natural y participación de actores no profesionales. A diferencia de este movimiento, los autores de la Nouvelle Vague no buscaban, en su mayoría, indagar en las temáticas que trataban sino simplemente describirlas. Con la libertad narrativa como premisa los directores de la Nouvelle Vague se propusieron también experimentar con las reglas del lenguaje cinematográfico, Jean Luc Godard -uno de los autores del movimiento que más se destacó junto con Truffaut- realiza en 1960 su primer film Sin aliento (Àbout de souffle) una obra que quiebra todas las leyes cinematográficas establecidas, transgrediendo las normas de raccord y continuidad entre plano y plano. No sólo quiebra la sintaxis del cine tradicional que establecía una coherencia espacio temporal, sino también la noción clásica de argumento, postulando un cine donde se pierde la coherencia narrativa, generando una revolución en la industria cinematográfica. La actitud de Godard es comparable a lo sucedido con los movimientos de vanguardia como el dada y el surrealismo.
A pesar de los postulados contra el cine academicista y de estrellas, el movimiento termina finalmente acomodándose a las leyes del mercado y genera su nuevo sistema de estrellas: Brigitte Bardot, Jean Moureau y Jean Paul Belmondo, serán los favoritos.
El cine de Francois Truffaut: amor, pasión, ternura e ironía
Truffaut demostró que era posible dirigir sin necesidad de haber pasado por la academia, aprendió el oficio viendo y haciendo cine y tomando contacto con sus realizadores. Desde Los 400 golpes hasta Confidencialmente Tuya (1984), su filmografía se halla plagada de afectos, recuerdos, y pasiones, en sus films puede observarse el realismo narrativo tomado de Renoir y una mezcla de humor sagaz heredado de Ernest Lubitsch y del suspense aprendido de Alfred Hitchcock, características estas que se constituyen en los rasgos más sobresalientes de su carrera como director.
Para acceder a su cine es necesario ver en su propia historia, pues Truffaut convirtió los acontecimientos más importantes de su vida en material cinematográfico, por eso las situaciones que atraviesan los personajes en sus films suelen parecerse a las que el mismo atravesó en su vida real. Sus películas expresan su concepción acerca del mundo. Para él el cine y la vida eran una misma cosa, sentía gran admiración por el cine clásico americano y el cine francés de autores como Jean Renoir y Robert Bresson, entre otros.
Temas
El amor y las pasiones, los conflictos de la infancia, la adolescencia perdida, las relaciones entre los hombres y las mujeres, son algunos de los temas que se repiten en sus films, en los que las mujeres adoptaron un papel preponderante. Truffaut tuvo una estrecha relación con muchas de sus actrices, en especial Jeanne Moreau, Catherine Deneuve y Fanny Ardant (su última pareja y con quien tuvo su tercera hija). Además de dirigir, Truffaut también escribió el guión de la mayor parte de sus películas, y apareció en varios de sus films como actor. También protagonizó Encuentros Cercanos del Tercer Tipo, película de 1977 dirigida por Spielberg.
Los 400 golpes y Antoine Doinel
Su consagración como director la obtuvo con Los 400 golpes, cuyo comienzo de rodaje coincide con la muerte de André Bazin en 1958. El film, de gran contenido autobiográfico, está basado en sus experiencias infantiles y juveniles. El nombre en francés hace alusión a una expresión que significa hacer travesuras o meterse en problemas. Narra las vivencias de Antoine Doinell, un niño de 12 años, interpretado por el actor Jean-Pierre Léaud, que no encuentra en su hogar la contención afectiva que necesita, lo cual lo lleva a cometer todo tipo de travesuras: desde mentir y faltar al colegio a espaldas de sus padres, hasta incurrir en el delito. La película deja entrever una crítica a los distintos estamentos de la sociedad: la familia, la escuela, la justicia, y en ella pueden encontrarse diversas situaciones coincidentes con la vida real de propio Truffaut. El film fue rodado en blanco y negro y predominan en él las escenas rodadas en las calles parisinas y en interiores reales. Se destacan también el uso del travelling y las panorámicas, así como la cámara subjetiva que enfatiza la identificación del espectador con el personaje. Antoine Doinel será protagonista de una serie de films dirigidos por Truffaut a lo largo de veinte años en los que vamos siguiendo su vida. En una serie de películas dispersas Truffaut construyó un personaje a la manera de su alter ego. A Los 400 golpes le sucedieron Antoine et Colette (fragmento de L’amour à vingt ans, 1962), en la que Doinel vive su primera historia amorosa; en Besos robados (1968), en la que conoce a quien será futura esposa; en Domicilio conyugal (1970), donde asistimos al nacimiento del primogénito de la pareja; y en El amor en fuga (1979) en la que Doinel/Truffaut, ya divorciado, hace un resumen de su vida y un repaso de lo mostrado en los anteriores filmes. Aunque hay diferencias personales y laborales entre Truffaut y Antoine, sigue habiendo mucho del director en el personaje, y es posible encontrar en estos films muchos acontecimientos coincidentes entre la vida del personaje y la de Truffaut.
La infancia
Los niños serán un factor común a lo largo de la filmografía de Truffaut, el tema de la infancia está presente en muchas de sus películas. En 1970 rueda El niño Salvaje, un film de época inspirado en la historia de un niño de unos 12 años que hacia 1800 fue encontrado abandonado en los bosques de Francia y recluido en una institución donde el Dr. Itard (interpretado en el film por Truffaut) intenta reintegrarlo a la sociedad. A diferencia de lo que se plantea en Los 400 golpes, aquí Truffaut deja entrever la posibilidad de la salvación a través del acceso a la cultura y la educación, algo similar a lo que le sucedió a él. También La piel dura (1976), aborda este tema con una serie de historias corales que narran la infancia de unos niños en la población de Thiers, durante el curso escolar de 1976. En este caso los profesores tienen vida propia y son afectuosos con sus alumnos, y de la película se desprende mucha ternura y la idea de Truffaut de la necesidad de brindarle a los niños atención, respeto y, sobre todo, cariño.
Pasion, amor y otros problemas
La opinión que tiene el autor del matrimonio, del amor, de la pasión, el adulterio, entre otros temas, ha sido reflejada en muchos de sus films a través de las vivencias de sus personajes. En Jules et Jim (1962), basada en una novela de Pierre Rochè, pone de manifiesto la pasión amorosa al contar la historia de dos amigos enamorados de la misma mujer, un triángulo amoroso que sólo se resolverá con la muerte. En Las dos inglesas y el continente (1971), adaptación también de una novela de Rochè, el triángulo cambia de género, narra la historia de amor entre dos hermanas inglesas y un joven francés al que apodan “el continente”, cuya presencia divide a las dos hermanas. Intenta mostrarnos aquí las diferentes etapas que enfrenta una relación con el paso del tiempo, desde el amor platónico al amor físico adulto, los dos extremos del amor para el director, entre los cuales hay parejas fugaces, ocasionales, que servirán de aprendizaje. En La piel suave (1964) la pasión entre un famoso literato, casado y con una hija, se enamora de una azafata y enloquece por amor a ella. Como suele suceder en sus films la pasión llevará a un final trágico, en una película que mezcla romance y policial y que tiene elementos que recuerdan al cine de Hitchcock. En otras dos películas Truffaut muestra también como el amor y la pasión pueden llevar a la obsesión y la locura La historia de Adele H (1975) y La mujer de al lado (1968). La primera es una adaptación de las memorias de la segunda hija de Víctor Hugo, quien huyó en 1863 a Halifax obsesionada por Albert, un oficial del ejército, y al no ser correspondida va enloqueciendo hasta perder el sentido de la realidad. La segunda narra la historia de dos amantes que se reencuentran años después como vecinos (ambos “felizmente” casados) y no podrán evitar que la pasión que sintieron en el pasado se reavive, una vez más la tragedia caerá sobre los amantes.
La literatura y el cine
En varios films hay detalles que remiten a su amor por los libros, en Los 400 golpes Antoine le erige un altar a Balzac, en La piel suave Balzac es el tema de una conferencia dada por el protagonista Pierre Lachenay, en Las dos inglesas… la historia de amor es mostrada a través de cartas, monólogos e intercambio de correspondencia y los créditos del film transcurren sobre el lomo de un libro. La adaptación de la novela de Ray Bradbury, Fahrenheit 451 (1966), será su máxima declaración de amor a la literatura, en el film se habla de una sociedad totalitaria donde los libros están prohibidos y son quemados en la hoguera, los rebeldes ante la imposibilidad de conservar los libros deciden memorizarlos para poder pasarlos de generación en generación.
El cine es también un tema recurrente en su filmografía, sus personajes leen cine, van al cine, discuten de cine, etc. en sus films hay una calle llamada Jean Vigo, un cartel que anuncia a John Ford, un ejemplar de Cahiers a punto de ser quemado en la hoguera y Jaques Tati hace una aparición como el Sr. Hulot en La piel suave. Pero el film en el cual Truffaut declara su amor al cine es La noche Americana, (1973) en el cual el autor interpreta a Ferrand un director de cine en pleno trabajo de rodaje y cuenta todos los problemas que atraviesa a lo largo de la filmación.
La serie negra
Disparen sobre el pianista (1960), es la primera incursión del autor en el cine negro, Truffaut hace en ella una fusión de géneros que van desde el thriller y el film noire hasta la comedia y el cine romántico. En La novia vestía de negro (1967), construye un thriller que narra la venganza de una novia a quien le mataron a su prometido el día de la boda. En La sirena del Missisippi, (1969) un hombre adinerado se casa con una mujer a la que conoce por carta, quien repentinamente desaparece con todo su dinero, una historia de amor, traición y muerte. En este estilo se enmarcan también Una bella chica como yo (1972) comedia con toques de cine negro que cuenta la historia de un sociólogo que entrevista en la cárcel a una joven acusada de asesinato y Confidencialmente tuya (Vivement Dimanche! 1983), su último film y un gran homenaje al cine negro y de suspense que el director tanto amaba. Las mujeres fueron los personajes mejor logrados en sus thrilers: figuras femeninas con una fuerte personalidad, en ocasiones crueles, pero que actúan siempre de acuerdo a su manera de ver y entender el mundo. Truffaut muestra en la construcción de estos personajes como en toda su filmografía el amor y la pasión que sentía por las mujeres.
Triste final
Poco después de terminar su última película, Vivement dimanche!, en 1983, Truffaut fue diagnosticado con un tumor cerebral y murió en un hospital el 21 de octubre de 1984. Fue uno de los mejores retratistas de la infancia y las pasiones humanas, a lo largo de su filmografía logró transmitir a través de sus imágenes la pasión que sentía por el cine, la literatura, las mujeres y la vida misma. En unos de sus tantos escritos Truffaut expresaba: “Siempre he preferido el reflejo de la vida a la vida misma. Si he elegido los libros y el cine desde la edad de once o doce años, está claro que es porque prefiero ver la vida a través de los libros y del cine.”(Telecine, múmero 160, año 1970)
Filmografía
Director y guionista
1955: Une visite.
1957: Les mistons (Los golfillos).
1959: Les quatre cents coups (Los 400 golpes).
1960: Tirez sur le pianiste (Disparen al pianista).
1961: Une histoire d’eau, codirigida con Jean-Luc Godard.
1961: Tire au flanc
1962: L’amour à vingt ans (El amor a los veinte años) (Episodio «Antoine et Colette»).
1962: Jules et Jim (Jules y Jim).
1964: La peau douce (La piel suave).
1966: Fahrenheit 451.
1967: La mariée était en noir (La novia vestía de negro).
1968: Baisers volés (Besos robados).
1969: La sirène du Mississippi (La sirena del Mississippi).
1969: L’enfant sauvage (El pequeño salvaje).
1970: Domicile conjugal (Domicilio conyugal).
1971: Les deux anglaises et le continent (Las dos inglesas y el amor).
1972: Une belle fille comme moi (Una chica tan decente como yo).
1973: La nuit américaine (La noche americana).
1975: L’histoire d’Adèle H. (Diario íntimo de Adèle H.)
1976: L’argent de poche (La piel dura).
1977: L’homme qui aimait les femmes (El amante del amor o El hombre que amaba a las mujeres).
1978: La chambre verte (La habitación verde).
1979: L’amour en fuite (El amor en fuga).
1980: Le dernier métro (El último metro) – César a la mejor película y mejor director.
1981: La mujer de al lado (La femme d’à côté)
1983: Vivement dimanche! (Confidencialmente tuya / Vivamente el domingo).
Guionista de obras de otros directores
1960: Al final de la escapada de Jean-Luc Godard (historia).
1962: Antoine y Colette, episodio de El amor a los veinte años, junto con Shintarō Ishihara, Marcel Ophüls, Renzo Rossellini y Andrzej Wajda.
1964: Mata-Hari, agent H21 de Jean-Louis Richard.
1983: Vivir sin aliento, Jim McBride.
1988: La pequeña ladrona, Claude Miller.
1995: La Belle Époque, Gavin Millar.
Actor
1956: Le coup du berger, Jacques Rivette.
1969: El pequeño salvaje, François Truffaut.
1971: Las dos inglesas y el amor, François Truffaut.
1973: La noche americana, François Truffaut.
1974: I’m a stranger here myself, David Helpern y James C. Gutman
1975: Diario íntimo de Adèle H., François Truffaut.
1976: La piel dura, François Truffaut.
1977: El amante del amor, François Truffaut.
1977: Close Encounters of the Third Kind, (Encuentros en la tercera fase/Encuentros cercanos del tercer tipo) de Steven Spielberg.
1978: La habitación verde, François Truffaut.